Según El Plan de Estudios 2011 de Educación básica, las Competencias para la vida movilizan y
dirigen todos los componentes –conocimientos, habilidades, actitudes y valores–
hacia la consecución de objetivos concretos; son más que el saber, el saber
hacer o el saber ser, porque se manifiestan en la acción de manera integrada.
Poseer sólo conocimientos o habilidades no significa ser competente, porque es
posible enumerar los derechos humanos y, sin embargo, discriminar a las
personas con alguna discapacidad.
La movilización de saberes se manifiesta
tanto en situaciones comunes como complejas de la vida diaria y ayuda a
visualizar un problema, poner en práctica los conocimientos pertinentes para
resolverlo, reestructurarlos en función de la situación.